“Un ironman es muy duro, dos en una
misma temporada es de locos. “ Es lo que pensé cuando me apuntaba
al Iberman de Huelva.
La cercanía, el precio y el ir a la
prueba con muchos amigos fué lo que determinó que me apuntara a la
prueba. También era una bala en la recámara por si Austria salía
mal ( problema mecánico, petada......).
Desde el primer momento dije que este
ironman estaría supeditado al anterior, tanto que si Austria me
salia bien pues este me lo tomaría de otra manera, y si salía mal,
pues podría desquitarme unos meses después.
Austria salió bien ( bueno.... muy
bien :) )y por la tanto pase al plan A en iberman.
El verano es una época donde por
diversas circunstancias ( calor, no tener rutina de horarios,
vacaciones familiares, niños 24h.....) no puedo entrenar casi nada,
me vuelvo más perezoso y si tengo un invierno duro, psicológicamente
necesito un paréntesis.
Por todo lo escrito anteriormente, el
verano ha sido bastante irregular de entrenos, en Julio después de
dos semanas de descanso total, hice dos semanas de entrenos muy
suaves y de recuperación. Los primeros 20 días de Agosto, nada de
nada, vacaciones a “tuti plen” de comida y bebida, convirtiéndome
en el “rey del buffet”. La última semana de Agosto y las dos
primeras de Septiembre si pude encadenar dias de buenos entrenos,
haciendo varias salidas de 100km y una de 150km, algo a pié y
nadando en playa. A partir de mediados de septiembre hasta ahora muy
muy poco ( sólo 2 días de bici y 1 de natación, en carrera si han
caido alguno mas).....
Así me presentaré el sábado en la
salida del Iberman.
Aunque después de la prueba de Austria
pensaba que merecía una prueba tranquila y sin presión, creo
sinceramente que no merezco presentarme en la línea de salida de la
prueba. Sé que con lo que llevo dentro, hasta puedo hacerlo
medianamente bien, pero un Ironman se merece un respeto, un esfuerzo
y sacrificio en entrenos que yo no he tenido..... veo lo que han
entrenado mis pupilos y me da vergüenza ir con la mitad de entrenos,
hasta incluso me he planteado el no ir. ( circunstancias y problemas
ajenos a este mundillo hacen que mi cabeza ahora esté en otro
sitio....)
Pero bueno, la verdad es que los amigos
tiran mucho y se que a algunos le dolería no verme alli. Así que
allí estaré, de nuevo en la orilla del mar para enfrentarme a la
mítica distancia. Mirándola cara a cara y poniendo todo lo que
tengo para cruzar por sexta vez esa meta mágica......y esta vez
junto a muchos amigos.
Nos vemos el sábado al amanecer
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